viernes, 12 de marzo de 2010

Modernismo literario

El surgimiento de una estética nueva:
   A fines del siglo XIX, dos escuelas literarias reemplazan al Romanticismo y representan tendencias opuestas: el Realismo y el Naturalismo en la novela y en el teatro, y el Modernismo en la poesía.
   El Modernismo es una escuela literaria de gran renovación estética. El canto de los poetas modernistas constituye la primera expresión de autonomía literaria de los países hispanoamericanos.
   El Modernismo se desarrolla entre los años 1880-1914. Esta escuela busca separarse de la burguesía y su materialismo, por medio de un arte refinado y estetizante.
   Con respecto al lenguaje, el Modernismo reacciona contra el retorcismo, el descuido formal del Romanticismo y la “vulgaridad” del Realismo y del Naturalismo. Se nutre básicamente de dos movimientos líricos surgidos en Francia, en la segunda mitad del siglo XIX: el Parnasianismo y el Simbolismo.
Parnasianismo y Simbolismo:
   El Parnasianismo es una escuela literaria que adhiere al “arte por al arte”. Según esta tendencia artística encabezada por Theóphile Gaurier, se desarrollaba una poesía de una confección perfecta, separada de la realidad, y que reaccionaba contra los poetas sociales y el hombre burgués. Los escritores buscaban la perfección a través de una poesía descriptiva, basada principalmente en la temática grecolatina.
   El Simbolismo es una corriente literaria subjetiva, que concibe el mundo como una trama misteriosa que presenta correspondencias entre los objetos que lo forman.
   Para sus representantes, la misión del poeta es sugerir esas alianzas por las que un objeto evoca a otro, con un lenguaje imaginativo lleno de símbolos (figura del discurso que representa un objeto abstracto mediante la mención de un objeto concreto, ej.: el cisne, símbolo de los modernistas, significa la belleza).
   Los simbolistas dan al verso efectos musicales y aportan nuevas métricas que conjugan el ritmo, el color y la plasticidad.
   Influido por las elaboraciones plásticas de los parnasianos y por las visiones musicales de los simbolistas, el Modernismo realiza su original trabajo artístico con la palabra buscando “la armonía verbal” del verso.
Desarrollo del Modernismo:
   En el desarrollo del modernismo, es posible identificar los siguientes momentos: Iniciación: La primera generación modernista (1882-1896). José Martí y Manuel Gutiérrez Nájera inician un trabajo de actualización de la lengua, principalmente en la prosa, aunque también en el verso, muy fijos al modelo español. Culminación: En 1888, Rubén Darío publica su libro Azul. En esta época ya se habían realizado grandes innovaciones en la palabra poética. Por medio de su obra en Chile, Argentina y España, Darío realiza una tarea excepcional, que consolida el Modernismo como movimiento continental y se convierte en su síntesis más brillante, tanto en América como en España. En 1896 se edita Prosas Profanas, el libro de Darío que oficializa el Modernismo en Hispanoamérica. v Continuación: La segunda generación modernista. Consagrado Rubén Darío como jefe de la escuela del Modernismo, cuando ya los iniciadores habían muerto prematuramente, los escritores de esta segunda generación continuarían la obra con sus aportes personales. Ellos son, entre otros, Leopoldo Lugones, Ricardo Jaimes Freyre, Amado Nervo, y Julio Herrera y Reissig.
Las etapas:
   De acuerdo con su temática y, a través de ella, y la manera en que el artista “mira” el mundo, se diferencian dos etapas en el desarrollo del Modernismo:
   Etapa Preciosista: Predominan los temas exóticos y símbolos de la antigüedad. El arte no ejerce un compromiso con la realidad sino que se relaciona con una estética de evasión, se eligen los paisajes versallescos y las innovaciones de la poesía francesa. Está representada por Prosas Profanas.
   Etapa Mundonovista: Se valorizan las raíces hispánicas de América y aparece el interés por los temas sociales y políticos de la época. Está representada por el Darío de Cantos de vida y esperanza, por Santos Chocano y el Lugones de Odas seculares.
Características del Modernismo:
   Se pueden establecer los siguientes rasgos del Modernismo:
  - Amplia libertad creadora.
  - Sentido aristocrático del arte. Rechazo de la vulgaridad.
  - Perfección formal.
  - Cosmopolitismo: el poeta es ciudadano del mundo, está por encima de la realidad cotidiana ¨ Actitud abierta hacia todo lo nuevo.
  - Correspondencia de las artes (aproximación de la literatura hacia la pintura, la música, la escultura).
  - Gusto por los temas exquisitos, pintorescos, decorativos y exóticos. Se constituyen como temas la mitología, la Grecia antigua, el Oriente, la Edad Media, etc.
  -Práctica del impresionismo descriptivo (descripción de las impresiones que causan las cosas y no las cosas mismas).
  - Renovación de los recursos expresivos: supresión de vocablos gastados por el uso; inclusión de vocablos musicales y de uso poco frecuente; simplificación de la sintaxis; aprovechamiento de las imágenes visuales; etc.
  - Renovación de la versificación: se le dio flexibilidad al soneto. Se prefirieron la versificación irregular, el verso libre y la libertad estrófica, que dio a la silva variedades desconocidas.
Significado del Modernismo:
   “Modernismo” es la palabra tomada de los simbolistas y elegida por Darío para designar la fructífera tendencia.
   Se ha dicho que el Modernismo representa la inquietud de una época: el final del siglo XIX, el cambio histórico que se refleja en el arte, la religión. Pero el Modernismo literario, más allá de ese contexto cierto, aportará un cambio definitivo en el manejo expresivo del idioma.
   Se ha señalado que el Modernismo concreta el sueño de los escritores románticos: diseñar un lenguaje típicamente latinoamericano, reconocido por los mismos españoles.
  A veces defendido y otras combatido, el Modernismo es la base sobre la que se desarrollará la literatura hispanoamericana del siglo XIX.